Más de la mitad de los ciudadanos de la de República Checa, Hungría e Italia le temen a los inmigrantes quienes los consideran una amenaza para el orden público y la seguridad de sus respectivos países. De acuerdo a un sondeo, realizado por el instituo Demos-La Polis y Pragma, el 50,7% de los italianos cree que los extranjeros que llegan al país son una amenaza. El 63,9% de los habitantes nativos de Hungría no ven con buenos ojos a los inmigrantes.
Pero más arriba La República Checa se lleva las palmas de intolerancia con un 66,3 por ciento entre las naciones del Europa.
El sondeo dio al Reino Unido un 36,5%, Francia (21,6%) y Alemania (29,3%).
Contra el racismo
Cerca de 50.000 personas salieron durante el fin de semana a las calles de varias ciudades italianas para protestar contra la xenofobia y el racismo. La preocupación por la poca tolerancia a los extranjeros ha llegado incluso a preocupar a la Alianza Nacional, el partido posfascista, que integra la alianza en el Gobierno de Pueblo de la Libertad.
El pasado viernes una mujer somalí casada con un italiano denunció haber sido desnudada y humillada por policías en el aeropuerto de Ciampino, Italia, lo que produjo sendos varios titulares entre la prensa italiana.
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